martes, 21 de diciembre de 2010

A él...

           

          Lo primero me gustaría aclarar que soy agnóstico, no creo en Dios. Esto no es un texto religioso, no habla de Dios. Habla de una persona, habla de la superación...

          Hermano, hoy te daré una gran lección. Te enseñaré, al igual que esa persona a mí, a evolucionar tu ser a la máxima potencia. Eres como yo, y, por tanto como él. Lo primero, debes conseguir un hábito de constancia. El me dio a mí, para esa meta, una agenda, en la cual apuntaría mis objetivos, el por qué de ellos y al final del día una reflexión sobre si los había conseguido no. Yo a ti, no te daré nada de eso… el hecho de querer evolucionar y querer como ser yo tendría que bastarte. Sin embargo te daré una ayuda: ponte una meta, márcate un objetivo, ten esa agenda en tu cabeza. Ese objetivo te lo daré yo. A pesar de que uno de esos objetivos que yo estoy aún desarrollando, tú lo tienes desarrollado al máximo, tu capacidad para escucharme a mí, a un loco, a tu hermano mayor que está en un proceso en el cual tú llevas ventaja, el proceso de madurar… Tus alas son mucho más grandes que las mías, pero eso no quiere decir que llegues más alto que yo, tenlo en cuenta.

Como ya sabes escuchar, no te hará falta lo que él me dio a mí. Aunque esa segunda connotación de aquello que me dio, tendrías que tenerla en cuenta. El hecho de no rechazar nada antes de verlo o probarlo… el no tener prejuicios. Una vez hayas conseguido te darás cuenta, de que aquello tenía una tercera connotación, respeto. El respeto a los demás, a sus manías, a sus hábitos… forma parte de ellos y no eres nadie para juzgarlos. Esto te llevará a la cuarta connotación, la paciencia, el hecho de poderte controlar a ti mismo, tus sentimientos, tus nervios… Autocontrol y la no exteriorización. Esta parte es muy importante. Si eres como yo, estarás expuesto a los demás. Eres como un libro abierto, tus gestos, tus ojos… todo dice como te sientes, eres vulnerable. Has de aprender a ser el mejor jugador de póker del mundo… aprende a que nadie sepa que jugada tienes, que nadie sepa si es un póker de ases o simplemente una pareja de doses… aprende a que no haya diferencia en tu rostro ante esas jugadas. Has de aprender a que nadie sepa que estás pensando, se inaccesible… A no exteriorizar.

Hermano, si me vas siguiendo, créeme que avanzas rápido… Gracias a todas estas cosas, mis problemas se iban y se disipaban, como el gris humo que espiras al fumar, primero se forma una densa nube… pero en cuestión de segundos se disipa.

Ya decía yo, raro es que no me preguntes ni me interrumpas… ¿Qué por qué esto ayudará en tu maduración? Interesante tu pregunta, ya te lo he dicho estamos ante la base de que seas como yo. Conseguirás un control sobre ti, un control inimaginable. Te diré lo que conseguirás con cada una de las connotaciones, o por lo menos lo que yo he conseguido descubrir.

Creando un hábito, consiguiendo tener constancia, mejoras de una forma abrumadora. Eso te ayudará a estudiar todos los días y en general a realizar cosas que requieren un esfuerzo continuo, aquello que requiera constancia. Obvio, tendrás que desarrollarla también en esas disciplinas, pero tendrás una base. El no tener prejuicios abre tu mente, aumenta el espacio por el que volar, te abre los ojos… creo que no hace falta más descripción que esta. Esta va seguida del respeto, si tú respetas a los demás y no los juzgas, ellos no lo harán contigo y las relaciones interpersonales serán parte de tu fuerte. Y ahora llegamos al culmen de las connotaciones, la que para mí es más importante. Esto requiere la base que tú tienes, el saber escuchar. Si consigues esto, podrás junto con la no exteriorización… El saber que decir, el sorprender a la otra persona, ante el hecho de la reflexión de tu respuesta… el que no la interrumpas… Y esto hermano mío, este objetivo… Te abrirá las puertas de un conocimiento
aún más profundo… No, aún no he llegado… Sí, tengo miedo de descubrir todo aquello que me espera.

Pero como sabes, le tenemos miedo a lo desconocido… eso son prejuicios, ante eso yo uso la curiosidad y el ímpetu que siento por mejorar… Mi necesidad de evolución, de cambio… mi inconformismo conmigo mismo. Cuando llegue a ese conocimiento lo sabrás… ¿Sabes cuál es mi miedo? Como decía el sacerdote Don Manuel, en el libro de título homónimo de Miguel de Unamuno… “Cuando miras a los ojos al sueño, es imposible volver a soñar”… lo bueno es que lo tendré a él, y a todos aquellos que me quieren, como tú hermanito…

Por último, te diré una cosa que él me dijo a mí… Una cosa que me marcó y me hizo confiar ciegamente en el… “Volaré a tu lado, solamente, cuando me necesites… y me iré cuando ya no me requieras”… Claro bobo, estaré siempre contigo. Al fin y al cabo, eres mi hermano y estaré allí cuando me llames. Pero solamente cuando me necesites acudiré yo. A pesar de esto, volaré siempre a tu lado. Ahora que sabes que tienes alas, puedes lograrlo todo y yo haré que llegues tan lejos como puedas… Al igual que el hará conmigo.

2 comentarios:

Arasthel dijo...

No está mal, pero lo que propones ante la vida parece una salida fácil, una que te aísla del mundo. ¿Seguro que es ese el camino hacia la madurez? Está claro que en ciertos momentos es mejor guardarse lo que uno piensa, pero siendo pasivos, dándole al mundo lo que quiere, sólo nos convertimos en un peón más, en otro ladrillo del Muro.

Un saludo!

Skrawl dijo...

Bueno, no propongo un camino que te aisla del mundo. Propongo una aceptación de el. El conocimiento al que te lleva esta disciplina es a conocer mejor al resto del mundo. Si sabes jugar bien tus cartas, ya hayas tenido una buena mano o no, puedes ganar una partida. Yo propongo un conocimiento de uno mismo hasta un punto extremo. No propongo ser pasivos, todo lo contrario... piensa por un momento conseguir saber que piensa el que tienes enfrente...¿Como conseguirlo? Sabiendo escuchar. Nunca le digas a nadie lo que quiere escuchar, eso es un error que he cometido yo, dile lo que tu piensas. Puede con coincida o no. Posiblemente no me haya explicado bien, porque como puse al principio no se escribir bien :). Propongo la no universalidad del individuo, ese hermano que describo ahí no existe, soy único al igual que todos. Propongo que cada uno explote al máximo sus capacidades. Por cierto buena comparación con la canción de Pink Floyd :D

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